La “Vinotinto” sub-20 hizo historia al pasar primera de grupo en el suramericano, pero dicha clasificación fue uno de los momentos mas dramáticos que hemos vivido con nuestra selección.
El ultimo juego decidía muchas cosas, luego del empate entre argentinos y ecuatorianos, una victoria nos clasificaba de primero, un empate también, pero una derrota nos dejaba fuera. El primero tiempo fue dominado por lo nuestros, donde logramos el primero gol, pero con un gasto físico que paso factura en la segunda parte en la cual fuimos apabullados por los “cafeteros”, quienes de penalti igualaban el marcador.
Los últimos 20 minutos fueron de infarto, ataque constante de los colombianos con un par de “palos”incluidos, pero a base de puro corazón, ya que las piernas ya no daban, lograron mantener el resultado y cuando ya el reloj marcaba el minuto 92 lo impensable ocurrió, penalti para Colombia. Todas las esperanzas y alegrías desaparecieron, la clasificación se desvanecía, la gente no lo podía creer. Los colombianos ya celebraban pero no contaban con la presencia de “Guacharaca” Baena durante todo el encuentro detrás del arco venezolano tranquilizando a Romo y dándole ánimos e indicaciones y obviamente tampoco contaban con el corazón de este joven guardameta quien se ha convertido en el héroe de todos los venezolanos.
Al final paradon de Romo y clasificación por primera vez de primer lugar al hexagonal final. Grande muchachos, demostraron que con corazón y con el apoyo de todo ese pueblo cualquier cosa es posible. Ahora solo nos queda clasificar al mundial de Egipto y realizar ese hito que tanto hemos esperado los venezolanos. Suerte nuevamente…!